«¿Podrías vivir sin Internet en medio de la nada? 🌍🚫📶» Mientras te lo piensas, ¡esta familia lo hizo de verdad! 🏡🌿 Construyeron una casa, montaron una granja y ahora viven felices fuera de la red. 🚜✨ ¡Lee más sobre su increíble historia a continuación en el artículo! 📖👨👩👧👦👇
Pocas personas acostumbradas a la vida en la ciudad y a las comodidades modernas estarían dispuestas a cambiarlo todo por un estilo de vida en un pueblo remoto. Pero una familia lo ha hecho, y no podrían estar más contentos.
Bryce, de 46 años, y Misty, de 36, junto con sus hijas, llevan más de una década viviendo en una granja autosuficiente. Ambos son cocineros profesionales y tomaron la decisión consciente de dejar atrás la vida urbana y construir un hogar en armonía con la naturaleza, libres de las influencias de la vida en la ciudad.
Desde que se conocieron, Bryce y Misty hablaron a menudo de mudarse al campo. Bryce tenía buenos recuerdos de las visitas a casa de su abuela, mientras que Misty, que sufría migrañas crónicas desde hacía años, se sentía mucho mejor cuando pasaba tiempo alejada del ruido y la contaminación de la ciudad. En lugar de ahorrar durante años para comprar una casa en las afueras, eligieron otro camino: construir su propia casa con materiales naturales en un lugar apartado.
Su casa, construida con una mezcla de arena, arcilla y paja, no tiene fontanería tradicional, sino que se abastecen de agua mediante un pozo y sistemas de recogida de agua de lluvia. La electricidad se genera mediante paneles solares, lo que elimina por completo las facturas de servicios públicos. Sorprendentemente, toda la casa se construyó en sólo cuatro meses y costó menos de 10.000 dólares.
Sus gastos anuales son de unos pocos miles de dólares. La familia cultiva sus propias frutas y verduras, cría ganado y aves de corral, y complementa su dieta con bayas y setas recogidas en el bosque cercano.
Sus hijas, Sage (7) y Aurora (5), reciben educación en casa y ya han aprendido una serie de habilidades esenciales.
La familia Eriens no tiene coche y se desplaza en bicicleta y a caballo. También han montado un pequeño negocio de venta de productos ecológicos y comidas caseras a la comunidad local. Bryce entrega personalmente los pedidos en un carro tirado por caballos.
Aunque saben que su estilo de vida no es para todo el mundo, les satisface enormemente su independencia y la vida sencilla y autosuficiente que han creado.