🎥 Internet se enamoró de una raya «risueña», hasta que los científicos hablaron. Lo que al principio parecía una monada se convirtió en un serio debate sobre el estrés animal y la ética de la vida marina 🐟💔 ¡Descubre lo que estaba pasando en realidad!
El usuario de TikTok mafishguy se hizo viral tras publicar un vídeo que obtuvo millones de visitas en apenas unas horas. Trabaja como pescador comercial, y en el clip mostraba a una pequeña raya reaccionando al ser tocada. El movimiento de la raya parecía el de un bebé que se ríe cuando le hacen cosquillas, lo que muchos espectadores consideraron adorable.
Pero aunque el vídeo se hizo muy popular -ya ha sido visto casi 167 millones de veces-, no todo el mundo lo consideró divertido. Como explica Lemurov.net, la publicación viral provocó una oleada de acaloradas discusiones en Internet.
Mucha gente se enfadó y dejó comentarios airados. Acusaron al pescador de crueldad. Los espectadores creían que la raya no se estaba «riendo» en absoluto, sino que el animal estaba sufriendo porque lo habían sacado de su entorno natural.
La sección de comentarios se llenó rápidamente de debates y reposts, a medida que más usuarios expresaban su preocupación por el maltrato animal. Pocos días después, el investigador marino Aaron Shepherd compartió una respuesta detallada al vídeo, poniéndose del lado de quienes defendían a la raya. Confirmó que cuando las criaturas marinas como las rayas son sacadas del agua, experimentan un estrés extremo. Tocarlas en esas condiciones, dijo, sólo aumenta su malestar.
Shepherd explicó que las rayas, al igual que las aves y los peces, pueden sentir dolor. Lo que en el vídeo parecía una cara sonriente con ojos expresivos era en realidad la respiración y las aberturas bucales de la raya. Sus verdaderos ojos se encuentran en la parte superior de la cabeza. Cuando el pescador le tocó el vientre, la raya no reaccionó de forma juguetona, sino que se esforzaba por respirar.
El investigador también criticó la tendencia de turistas y buceadores a tocar a los animales marinos. Advirtió que la vida marina no experimenta emociones similares a las humanas y que la mayoría de los contactos con los humanos provocan miedo o dolor. Su advertencia fue respaldada por Ben Williams, miembro de la Sociedad Mundial Protectora de Animales.
La reacción contra el vídeo no se limitó a TikTok, sino que llamó la atención de los principales medios de comunicación. Consciente de la controversia que había suscitado su vídeo -y probablemente sin esperar semejante reacción- mafishguy publicó un vídeo de seguimiento unos meses después. Esta vez, se mostraba a sí mismo liberando a la misma raya pequeña en el océano, donde pertenecía.