«Pensaban que solo era un trozo de metal oxidado, hasta que los escáneres revelaron la verdad». ⚔️🕵️♂️ Enterrada durante siglos cerca de una tumba romana, esta antigua daga parecía un montón de tierra sin valor… hasta que los expertos descubrieron su verdadera identidad.
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Durante una excavación hace unos años, un estudiante de arqueología hizo un descubrimiento que al principio no parecía gran cosa. El objeto estaba en muy mal estado, completamente cubierto de tierra y minerales. Pero después de casi un año de minucioso trabajo por parte de los expertos, resultó ser algo extraordinario.
En 2019, mientras excavaba en un antiguo cementerio romano cerca de la ciudad alemana de Münster, un estudiante descubrió lo que más tarde se identificó como una daga militar romana, conocida en latín como pugio. El yacimiento, llamado Haltern am See, albergaba muchos artefactos romanos, pero este era especial.
La daga fue encontrada en las ruinas de lo que solía ser una cámara funeraria. Los expertos creen que la tumba probablemente perteneció a un legionario romano.
Lo que hizo aún más emocionante el hallazgo fue lo raro que es encontrar una daga romana en un estado tan completo, aunque a primera vista pareciera muy dañada.
El objeto medía unos 30 cm de largo y estaba completamente mineralizado, enterrado en un montón de tierra dura. Junto con la hoja, también se encontraron partes de la vaina, decoradas con plata y latón, lo que indica que podría haber pertenecido a un oficial de alto rango, y no a un simple soldado.
Los especialistas en restauración tardaron nueve meses en limpiar y estudiar cuidadosamente la daga. Antes de comenzar la limpieza, el equipo utilizó rayos X y tomografías computarizadas para ver el interior del objeto sin dañarlo.
Las tomografías revelaron muchos detalles: la hoja estaba fabricada con varios tipos de acero, lo que coincide con las técnicas conocidas de los herreros romanos durante los primeros años del Imperio.
También había indicios de que la daga se había utilizado en situaciones reales: los daños cerca de la punta y las marcas de desgaste demostraban que no era solo decorativa.
Basándose en la forma y otros detalles del diseño, la daga fue identificada como del tipo «Vindonissa». Este estilo de daga recibe su nombre de un campamento militar romano situado en la actual Suiza.
Estas hojas eran conocidas por ser fuertes y estrechas, fabricadas tanto para la lucha como para las tareas cotidianas.
Una vez completada la restauración, la daga pasó a formar parte de la colección de un museo, donde ahora se conserva como un artefacto raro y valioso.
¡Gracias por leer! ¿Habrías adivinado que este trozo de metal oxidado era un arma romana? ¡Cuéntanos qué opinas de este increíble descubrimiento en los comentarios!
